Lucas Correa
5 de jul de 20213 min.
Actualizado: 2 de feb de 2023
Pensar en el fin de la vida es importante en cualquier momento. Nunca estamos muy jóvenes o saludables para no hacerlo. Con frecuencia creemos que tenemos mucho tiempo, hasta que es demasiado tarde. Ejercer el derecho a morir dignamente en Colombia exige preparación y reflexión. Pensárselo y discutirlo con los familiares y amigos más cercanos.
En Colombia, todos tenemos derecho a morir dignamente, pero esto no significa que en cualquier momento podamos acceder la eutanasia –la ayuda efectiva para morir provista por un profesional de la medicina– o que podamos desistir o interrumpir tratamientos innecesarios o ineficaces en cualquier momento. Para que se nos garantice el derecho a morir dignamente hay que haber manifestado la voluntad y el consentimiento y es ahí donde debemos y podemos anticiparnos.
Si quiere saber con más detalle qué significa tener derecho a la muerte digna, haga click acá.
Difícilmente podemos prever una enfermedad grave o que nuestra salud se deteriore rápidamente producto de un accidente. No sabemos si más adelante tendremos la oportunidad o la capacidad de manifestar nuestra voluntad de acceder a la eutanasia. Por eso, vale la pena pensar, decidir y suscribir un Documento de Voluntad Anticipada (DVA), para que en caso de necesitarlo, nuestras decisiones sean conocidas y respetadas por los médicos y por nuestras familias.
Estos documentos permiten tomar decisiones que se van a ejecutar en el futuro, permiten anticiparse a situaciones de salud o emergencias que, eventualmente, le impidan manifestar sus deseos y voluntades.
Las decisiones y deseos consignados en un DVA pueden cambiar en cualquier momento mientras usted goce de buena salud y tenga capacidad. Sin embargo, se vuelven de obligatorio cumplimiento en los casos en que su salud se deteriore o pierda la capacidad de decidir. Es allí en donde su función se vuelve relevante, pues sirven para que su voluntad sea respetada cuando usted no pueda hacerlo directamente.
A través de los DVA se pueden tomar decisiones relativas a la salud, al fin de la vida y a la muerte. Normalmente se toman tres tipos de decisiones que se complementan entre sí:
El acceso a cuidados paliativos.
El acceso a la Adecuación del Esfuerzo Terapéutico (AET) que consiste en no comenzar, interrumpir, desistir o modificar tratamientos y procedimientos que resulten innecesarios, inocuos, ineficaces para curar la enfermedad y que deterioren la calidad de vida sin producir directamente la muerte.
El deseo de acceder a la eutanasia, la ayuda médica efectiva para poner fin a la vida.
Existen algunos formatos de DVA prediseñados y disponibles para su firma rápida. Estos formatos ahorran tiempo y dinero. Sin embargo, cualquier persona puede diseñar su propia directiva anticipada en donde se refiere a temas de salud, del fin de la vida, de la muerte, pero también a otros aspectos económicos, patrimoniales, entre otros.
DescLAB dispone de dos formatos de DVA que las personas pueden usar de forma gratuita. Click acá para consultarlos.