En estas semanas, la mayoría de estudiantes colombianos comenzarán el año escolar. Para los estudiantes con discapacidad y sus familias, este es un momento crucial para garantizar su derecho a la educación inclusiva y para que la pandemia del Coronavirus no se convierta en una excusa para excluir y segregar. Para guiarlos en lo que hay que hacer #EscuelaParaTodos de DescLAB les comparte los siguientes 6 pasos clave, para que no los pierda de visa.
Paso 1. Si no tiene cupo. manos a la obra. Si a estas alturas de enero su hijo/a con discapacidad no tiene asignado un cupo en una escuela cercana a su lugar de residencia, es central ponerse las pilas y manos a la obra a solicitarlo.
En la sección de "No pude matricular a mi hijo" de #EscuelaParaTodos le contamos qué debe hacer para conseguir un cupo escolar en una escuela regular e inclusiva. Tenga en cuenta varias cosas:
Todas las escuelas deben ser inclusivas, no algunas, no las más avanzadas, no las que quieren. Todas deben ser incluir niños y niñas con discapacidad.
A veces, las familias prefieren algunas escuelas, porque en algunas tienen más experiencia. Sin embargo, hay que entender que, no en todos los casos, es posible que los niños vayan necesariamente a esos colegios.
No coma cuento, haga las solicitudes por escrito, exija que las respuestas a las mismas se las den por escrito, no acepte respuestas verbales, eso solo lo hará perder tiempo cuando tenga que ponerse serio y buscar la ayuda de un abogado.
Si no le resuelven el cupo escolar rápidamente, no pierda tiempo acuda a un consultorio jurídico, a la personería o busque un abogado para proceder con una acción de tutela.
Paso 2. Tome una copia del PIAR de su hijo/a, revíselo al detalle, vuélvase dueño y gestor. Haga los comentarios que tenga en una hoja aparte para, luego, compartirla con el nuevo maestro en este año que comienza.
Si no sabe qué es un PIAR, qué debe incluir o para qué sirve, revise esta nota de blog. Recuerde que el PIAR es un instrumento muy poderoso para garantizar la inclusión y, las familias, deben saber todo sobre el PIAR, participar de su elaboración y verificar que se cumpla a lo largo del año escolar.
Si a estas alturas usted no está seguro de si su hijo/a tiene un PIAR o si durante el año escolar pasado no le elaboraron un PIAR, este es el momento para comenzar con el pie derecho y solicitar el PIAR al colegio y al docente que vaya a ser responsable del curso este año escolar. En #EscuelaParaTodos le contamos cómo hacerlo.
En esta nota de blog les contamos por qué es importante que las familias participen de la elaboración de PIAR y cómo pueden hacerlo. Click aquí para leer la nota.
Paso 3. Es fundamental que sepa cuáles apoyos pedagógicos y ajustes razonables que requiere su hijo. Haga una lista de los principales apoyos y ajustes que requiere su hijo, tengan en cuenta lo que antes ha funcionado, no olvide aquello que usted como familia y otros maestros han intentado en el pasado y que no ha funcionado. Todos esos son insumos para los nuevos maestros que entran ahora en la película.
Una familia que tiene claro qué son los apoyos pedagógicos y los ajustes razonables a los que tiene derecho su hijo/a con discapacidad, es una familia mejor preparada y con mejores herramientas para garantizar la educación inclusiva.
En #EscuelaParaTodos le contamos qué son los apoyos pedagógicos y los ajustes razonables, qué características tienen y cómo se pueden solicitar al sistema educativo.
Paso 4. Arme una carpeta con toda la información necesaria. Incluya los documentos médicos, pero también información pedagógica y educativa. Uno de los elementos que hacen exitosa la educación inclusiva es tener altas expectativas para con eso que los estudiantes son y pueden lograr. Nada bueno resulta al enfocarse en las dificultades.
Por eso es clave poder tener toda la información sobre los estudiantes y entregarla a los docentes. Con frecuencia creemos que a los maestros hay que llevarles diagnósticos médicos, un papel que diga qué tiene y qué no puede hacer el niño. Eso sirve poco o para casi nada. Incluya la información médica, pero incluya la información pedagógica que le permita al maestro conocer al estudiante, qué le gusta, qué lo motiva, qué ha logrado, entre otros aspectos positivos. Acá le damos unas claves para desmedicalizar el salón de clases.
Paso 5. No se quede sentado, identifique y acérquese al maestro. Identifique al docente de aula que será responsable de su hijo o hija en este año que comienza y contáctelo, búsquelo, pídale una cita. En muchos casos estamos agotados, cansados y somos negativos producto de la lucha diaria que significa exigir y garantizar el derecho a la educación inclusiva, pero siempre vale la pena llenarse de buena energía e intentar, nuevamente, entablar una relación positiva con el maestro.
El objetivo debe ser ese: entablar una relación positiva con el maestro, engancharlo, no mostrar a nuestros hijos con discapacidad como un problema, ni como un asunto difícil, que requiere mucho tiempo o esfuerzo. Todo lo contrario, facilitarlo, ser parte activa, ayudar, simplificar. Para esto hay que hacer varias cosas, estar dispuestos a convencer y capacitar a los maestros, pero también abiertos a probar nuevas alternativas, nuevas prácticas que le permitan a nuestros hijos avanzar.
Paso 6. Piense acciones pequeñas y concretas para enganchar a las demás familias. La educación inclusiva no pasa de forma solitaria, se necesita de las demás familias de los estudiantes con y sin discapacidad. Se trata de transformar al colegio en un lugar donde quepan todos los estudiantes, donde se les dé respuesta a lo que requieren, en donde se compita menos, se colabore más, en donde es reconozcan diversos estilos, modos, tiempos, formas y logros. Para eso hay que tener como aliados a las demás familias.
La educación inclusiva es un derecho humano, no un favor, no una moda, no es una tendencia o algo pasajero que los maestros o los colegios pueden simplemente omitir. Pero la educación inclusiva no sucede de un momento a otro, requiere de familias que tengan claro lo que sus hijos/as necesitan, el rol que deben desempeñar los maestros, qué sepan los pasos, los instrumentos y las herramientas necesarias para garantizar este derecho. Por eso existe #EscuelaParaTodos, para brindar esa información.